Es de un tamaño un poco mas pequeño que el yo suelo usar para tomar té
pero no pude resistirme a traérmela cuando la encontré
Como si me dijera que quería formar parte de mi colección
De porcelana alemana es a la vez delicada y robusta
Juega a colocarse de diferentes maneras sobre el plato
Y posa rodeada de flores siendo conocedora de su belleza
Vienen a mi memoria imágenes de una preciosa rosaleda
en los jardines del Volksgarten en Viena
Hay sillas suficientes para todos los que queráis venir
y nos podemos sentar tranquilamente a tomar un té
mientras contemplamos las rosas
paseando por el jardín llegamos hasta el monumento a Sissi
y nos tomamos la última taza de té junto a ella
El primer té de septiembre